Saturday, March 28, 2015

Noche y Niebla

Cada día va quedando mas clara la historia que armaron para liquidar a Nisman. El papel de Lagomarsino se hace cada dia mas turbio, mas espeso, mas denso de oscuridad. Desde el mismo instante en que reconoció que el que lo presento a Nisman fue un espia a sueldo de la Policía Aeroportuaria, fuerza de reconocida disciplina kirchnerista, esa oscuridad se hace maciza, impenetrable, siniestra hasta lo indecible. Desde el mismo instante en que aparecen datos completamente no relevantes para la causa, como ser la incomprobable circunstancia de que Nisman le morfaba la mitad del sueldo, o las fotos, o la designación de un abogado embrollero que puja por ser alguien en una causa que no tiene como sospechoso a su cliente. Todo va cerrando en una emboscada en la que lagomarsino, un inorgánico al completo servicio de la causa, aporta su camionada de arena aceptando que "prestó" el arma, (mi hipótesis es que nunca se la prestó, nunca se la pidió, es ridículo pensar que un fiscal que puede portar una Glock, se haga de una 22 modelo del orto), y contribuyendo al asesinato de carácter que se realizó con perfecto timing, acerca de la información que fue suministrando, o la burrada que dijo hoy acerca de "llevarse puesta a Cristina". Mi hipótesis es, también, que él franqueó la puerta, junto a uno de los custodios, al ejecutor. Encubridores directos, a través de la completa destrucción de la escena del crimen, fueron todos y cada uno de los presentes en el departamento de Nisman. Desde la fiscal Fein, una vergüenza de persona, una tragedia en lo profesional, que nunca pregunto o aclaró qué se llevaban ese fulano y algunos prefectos en esas valijas que sacaron del departamento. Nisman murió para que no diera batalla mediática, porque su denuncia podía correr el mismo destino que el que esta corriendo ahora, aun si estuviera vivo. Lo que no podían permitir es a un tipo como el, hablando y hablando en los medios, nacionales e internacionales, sobre lo que el interpretaba como una enorme conspiración delictiva en la que la propia presidente estaba involucrada. La densidad de la oscuridad en la que estamos viviendo, aun comprendiendo la algarabía de algunos que piensan que estamos en tiempos crepusculares, finales de tiempo, cierres, caídas y pases de facturas, nos confronta con una realidad que, de jodida nomas, se va haciendo interminable, se va haciendo imprecación, invectiva e insulto. El fárrago artificial e indigente de medias verdades y directas mentiras con que nos embucharon durante mas de una década nos embotan los sentidos y la inteligencia. Una sociedad que admite, mansa, que la saqueen, que la meneen, que la embrutezcan sin miramientos, sin vergüenza, sin pudor. Noche y niebla.